Hoy quiero comentarte que aunque la dieta cruda está en boca de todos los doglovers, éste tipo de dieta no es para todos los perritos. Mejor dicho, la dieta natural es para todo tipo de perros pero no todos debieran comerla cruda. 

He comentado anteriormente que si bien el perro es prácticamente idéntico al lobo en cuanto a su fisiología, es la anatomía de nuestros perros la que ha cambiado de manera drástica sobre todo los últimos siglos. 

Los cambios anatómicos en algunos casos afectan la capacidad digestiva de nuestros perros: por ejemplo perros braquicefálicos (hocico corto) tienen un intestino más corto, perros muy pequeños tienden a tener problemas dentales, y así encontramos muchos casos en que la raza del perro afecta directamente su capacidad digestiva y predispone a ciertas enfermedades o estados fisiológicos que hacen que sea más seguro entregar una dieta semi cocida. 

A continuación te explico cuándo es mejor evitar los alimentos crudos.

1. IBD: aunque algunos perros con enfermedad inflamatoria intestinal (o problemas digestivos crónicos) se controlan muy bien con dieta natural, no todos logran tolerar bien los alimentos crudos.
   

2. Preñez y lactancia: durante este periodo las perras pueden estar más propensas a adquirir infecciones virales o bacterianas, por lo que se sugiere dar alimento semi cocido.
   

3. Destete: es ideal que  nuestros perros se alimenten con dieta natural desde el destete, sin embargo y sobre todo en caso de razas más delicadas (Toy o braquicéfalas) se recomienda que la dieta se de semi cocida hasta los 4 meses de edad.
   

4. Geriátricos: al igual que durante la preñez y lactancia, los perros geriátricos están más propensos a hacer cuadros infecciosos graves en comparación a los perros jóvenes, por lo que se recomienda darles dieta semi cocida.

Por: Dra. Natalia Stephens 👩🏼‍⚕️
Médico Veterinario
Especialista en Dieta Natural para Caninos, DNM University
Fundadora Huargos Chile