Un estudio realizado por la Universidad de San Diego, California concluyó que los perros son más propensos a exhibir comportamientos “celosos” (como empujar a sus dueños o traer un objeto) cuando los tutores acariciaban y/o hablaban con voz de bebé a otro perro.

Este tipo de conductas no se demostraron cuando los dueños hacían lo mismo con un objeto. Así pareciera respaldarse la idea de que para algunos perros, no recibir la atención de la persona no era tan malo como ver a otro perro disfrutarla.

Controversia

La actividad cerebral de los perros frente a esta situación fue medida, observando una alta actividad en la región cerebral de la Amígdala. Sin embargo, algunos científicos postulan que esto no prueba de manera irrefutable que los perros sienten celos, ya que la Amígdala muestra actividad similar frente a otras emociones, como la ansiedad, la ira, la envidia y el miedo.

La activación de la amígdala no debe equipararse con emociones específicas; debe interpretarse de manera más amplia como un indicador neurobiológico de alta excitación.

Conclusión

Independientemente de que no podamos decir con certeza que los perros sienten celos, si está claro que sienten emociones. Y pareciera que cuanto más evidencia se recopila, más paralelos existen entre la emoción del perro y la emoción humana, no sólo a nivel cerebral sino que también en comportamiento. 

¿Y tu perro se pone celoso?

Por: Dra. Natalia Stephens 👩🏼‍⚕️
Médico Veterinario
Especialista en Dieta Natural para Caninos, DNM University
Fundadora Huargos Chile

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